John Koerner tenía solo 18 años cuando plantó las semillas que crecieron y se convirtieron en su empresa, Elite Outfitting Solutions. Trabajaba como maquinista en Choppers y los fines de semana usaba sus máquinas para dar vida a sus propias ideas, principalmente una billetera de metal resistente y de perfil bajo. Comenzó a venderlas por su cuenta y la demanda de los clientes creció rápidamente. En 2014, Koerner obtuvo un préstamo—tuvo que poner su motocicleta y su coche como garantía—y compró su primera máquina.
Esos primeros meses fueron angustiosos: necesitaba ganar suficiente dinero para pagar el préstamo e innovar productos que mantuvieran a los antiguos clientes y atrajeran a nuevos compradores. Cuando la empresa fue lo suficientemente rentable como para contratar a un segundo miembro del equipo, fue un gran alivio.
A medida que Elite Outfitting Solutions crecía, Koerner continuó haciendo inversiones inteligentes, incluyendo un sistema de supresión Firetrace que salvó a su empresa de perder millones de dólares cuando se desató un incendio en su taller este enero. “Tendrías que estar loco para no comprar un sistema Firetrace si tienes una máquina con refrigerante de aceite,” dice Koerner. “Nunca me pondría en ese riesgo.”
Elite Outfitting Solutions es una operación pequeña con solo cinco empleados, y cada miembro del equipo, especialmente Koerner, tiene que asumir responsabilidades que van desde el diseño y la fabricación hasta la atención al cliente. El 3 de enero, Koerner estaba al teléfono con un cliente mientras la máquina Citizen cortaba tornillos de titanio. Un taladro de .078” a 50,000 rpm lanzó algunas chispas y creó una bola de fuego al golpear el refrigerante a base de aceite. Antes de que Koerner pudiera llegar al otro lado del taller para activar el interruptor manual del sistema Firetrace, este se había activado automáticamente y extinguido el incendio en lo que Koerner estima fueron cuatro segundos.
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“Gracias a Dios que tenía el Firetrace instalado, porque probablemente habría destruido esa máquina y probablemente todas las demás máquinas de mi taller”, dice Koerner. “Podría haber sido una pérdida de unos cuantos millones de dólares. Sin mencionar que no somos el único negocio en este edificio. Podría haber sido un desastre absoluto.” En cambio, la máquina solo sufrió daños mínimos: unas pocas líneas de aire de plástico fácilmente reemplazables se derritieron.
Fue la primera vez en su carrera que Koerner se encontró con un incendio.
Desde sus inicios, la línea de productos de Elite Outfitting Solutions se ha expandido para incluir cuchillos de bolsillo de alta gama y otros artículos de uso diario. Pero su producto principal sigue siendo la billetera, que es simple y está ingeniosamente diseñada: solo dos placas delgadas de acero inoxidable, aseguradas por doce pequeños tornillos y seis bandas robustas, y equipada con un delgado clip de titanio. El diseño duradero y utilitario atrae a los consumidores que trabajan y se divierten intensamente, y que quieren accesorios que puedan seguir su ritmo.
Las billeteras no eran particularmente difíciles de fabricar, excepto por los tornillos, que Koerner tenía que subcontratar. “Comprábamos tornillos que eran demasiado largos para nuestras billeteras y los lijábamos a mano para acortarlos”, dice Koerner. “Cuando tienes que hacer como 50 o 100 a la semana, está bien. Pero cuando tienes que hacer como 2000 a la semana, empezaba a salirse de control.”
Eventualmente, Koerner decidió invertir en una Citizen, una máquina de $250,000 que podía fabricar los tornillos cortos necesarios para reforzar sus billeteras y que también era capaz de trabajar con el titanio que necesitaba para varios otros productos. Opera con un refrigerante a base de aceite, en lugar de agua, lo que significa que el riesgo de incendio era mayor que con sus otras máquinas, que operan con refrigerante a base de agua.
“Inmediatamente me dijeron: ‘Necesitas poner un sistema de supresión de incendios en esta máquina. Estas cosas pueden incendiarse y puede ser catastrófico si no tienes el equipo adecuado en su lugar’”, dice Koerner. “Era más dinero del que quería gastar en un extintor de incendios. Pero me alegra mucho haberlo comprado.”
En los cuatro años desde que compró la máquina, Koerner pasó por muchas pruebas y errores para acostumbrarse a la Citizen. Fue una apuesta, dice Koerner—su padre, un exitoso vendedor que lo asesora en la mayoría de sus decisiones comerciales, lo alentó a pensar detenidamente si era necesario.
Pero a pesar de ser una inversión audaz y potencialmente arriesgada de tener en el taller, la Citizen ha abierto puertas para Elite Outfitting Solutions. No solo les permitió perfeccionar sus propios productos y optimizar su fabricación, sino que ahora se han convertido en un proveedor de referencia para hardware fabricado en EE.UU. para cuchillos. La mayoría de los talleres son capaces de fabricar hojas y mangos, pero no tienen el deseo ni los medios para comenzar a mecanizar tornillos.
“Las piezas de la máquina de tornillos han sido realmente lucrativas para nosotros, una vez que nos acostumbramos. Me encantaría tener un par más de estas máquinas en mi taller en el futuro”, dice Koerner. Después de que hablamos con él, se estaba preparando para cortar más piezas en la Citizen, solo una semana después del incendio. “No puedo imaginar cuánto dinero me costaría si no tuviera esta máquina durante dos meses.”
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